Si me seguís desde hace tiempo sabréis que estoy un poco obsesionada con las ondas sueltas. En este blog os he enseñado a hacer un spray de sal de mar casero, os he hablado de productos para conseguir este efecto que he probado y hasta os he enseñado el tutoríal del peluquero de moda en L.A. No cabe duda, me encantan las ondas.
Es por eso que cuando descubrí esta gama de tresemmé me quedé fascinada. Tanto esta espuma que os enseño como la versión spray tienen un acabado nada pegajoso y muy natural. No ensucian para nada el pelo como el spray de Aussie, son muy económicos y los puedes encontrar en cualquier supermercado o tienda de cosmética.
Y como os decía, he probado los dos formatos, spray y espuma, y ambos me gustan. Personalmente me funciona mucho mejor la espuma ya que mi pelo es ondulado y consigue trabajar las ondas sin aplicar calor y sin dejar ese acabado acartonado que tanto odio. Por otro lado, el spray lo dejo para aquellos momentos en que me paso la plancha o el secador y tengo demasiado «acabado de peluquería» y quiero aportar un poco de textura. Viva el second day hair!